Hubo muchos sucesos que hicieron que se creara esta conmemoración, uno de ellos fue un incendio, el 25 de marzo de 1911 que acabó con la vida de unas 149 personas en una fábrica de Nueva York. La mayoría de los muertos eran mujeres que trabajaban en pésimas condiciones y eran pobres.
Pienso que las mujeres necesitamos ser tratadas igual que los hombres, que no hay derecho a que nos desprecien porque podemos hacer lo mismo que ellos. Hoy en día, hay muchas mujeres que trabajan lo mismo que los hombres, o incluso más, y cobran menos. Y es que no me parece nada justo, porque, encima, la mayoría de ellas hacen los trabajos de la casa, llevan a sus hijos a donde haga falta, etc. Por suerte, cada vez hay menos de esos casos y hay muchos hombres que también hacen la comida, hacen los trabajos de la casa y llevan a sus hijos a donde haga falta. Pero si ésto se hubiera solucionado, esta conmemoración no existiría, porque no sería necesario que reclamaran tener el mismo derecho que los hombres.
Esta conmemoración se creó para acabar con la discriminación, para que se erradiquen las violencias machistas, que se alcance la igualdad salarial, la universalización de los cuidados, la libre elección... A lo largo de los años se ha ido progresando, pero hay muchos problemas por solucionar.
Este año ha habido muchos famosos que conmemoran la lucha por la igualdad de género, como Emma Watson, que promueve la campaña #HeforShe. Esto está muy bien porque ahora todo lo que hacen los famosos se cree que es genial, y si todo el mundo viera lo buenas que son las campañas que intentan que se alcance la igualdad de género y que la gente empiece a ayudar, llegaría un día en que no haría falta esta conmemoración, porque su propósito se habría cumplido.
Paula Ruiz Àlvarez, 8 de marzo de 2016
